Pereira-Medina. (2021). Entornos Personales de Aprendizaje en la Educación Superior: Una alternativa para construir espacios
de innovación. Revista Tecnológica-Educativa Docentes 2.0, 10(1),12-24, https://doi.org/10.37843/rted.v10i1.174
Entornos Personales de Aprendizaje en la
Educación Superior: Una alternativa para
Construir Espacios de Innovación
De este modo, al aparecer internet
aparejado de un abanico de oportunidades para
buscar y compartir información, sumado al
incremento del acceso a tecnologías, ha
permitido su integración de modo gradual en el
ámbito educativo, impactando en sus diversos
niveles. En consecuencia, instituciones,
profesores comenzaron a emplear tecnología
con el propósito de modificar, enriquecer su
experiencia docente. En una primera fase,
afirman Silva & Romero (2013), dicha
tecnología fue utilizada como una extensión en
práctica docente presencial, no obstante, el uso
de estos recursos más la experiencia
acumulada, provocaron una evolución hacia
nuevas perspectivas, incorporando otras aristas
en el discurso pedagógico
En este orden de ideas, Salinas (1997),
sostiene que el factor central del proceso
educativo, el aula de clase y el tiempo asociado
a esta, se desdibujan, pues tiempo, lugar, acción
se modifican, ahora no necesariamente
confluyen, por cuanto, las Tecnologías de la
Información y la Comunicación (TIC) admiten
el uso de los recursos a una mayor cantidad de
personas, quienes no precisan estar físicamente
en el mismo lugar. De esta forma, aquellas
coordenadas de espacio y tiempo impuestas en
educación tradicional, asociadas a un espacio
físico para una reunión síncrona, abren paso al
surgimiento de nuevos escenarios de
aprendizaje, donde la ubicuidad está presente.
Resulta evidente, las instituciones de
educación superior asumen el compromiso de
generar nuevos planteamientos frente a estos
cambios, ¿cómo pueden lograr este objetivo?,
existen diversos caminos, sin embargo, estas
respuestas es posible encontrarlas en el
componente innovación, asociada al uso de
TIC; sumado, a modificaciones de estructuras
universitarias, producto de incorporar estas
tecnologías; finalmente, en prácticas
innovadores en general, cuyo propósito se
enfoca en aprovechar todo el potencial de las
TIC (Salinas, 2004).
Con referencia a lo anterior, Fullan &
Stiegelbauer (1991, citados por Salinas, 2004),
destacan innovar está asociado con los
procesos de enseñanza-aprendizaje, involucra
cambios relacionados con integrar nuevos
materiales, conductas, prácticas de enseñanza,
así como, creencias, concepciones. Según,
Morín & Seurat (1998, citados por Salina,
2004), al mencionar el hecho de introducir
condiciones diferentes, no significa entender
por innovación solo el resultado de investigar,
también puede ser consecuencia del
aprovechamiento de tecnologías, las cuales han
sido desarrolladas en otras áreas.
Al respecto, el informe Innovating
Report de la Open University (citado por Gros,
2015), considera innovación el “aprendizaje sin
costuras o sin fisuras”, aquel aprendizaje a
través de diversos contextos a lo largo y ancho
de la vida, de esta manera incluye los diversos
entornos transitados por cada individuo, según
Sharples et ál. (2012, citado por Gros, 2015)
“es cuando una persona experimenta una
continuidad de experiencias de aprendizaje a
través de diferentes contextos y tecnologías”
(p. 61), por lo tanto, es posible relacionarlo con
los aprendizajes desarrollados con el soporte de
los entornos virtuales.
Cabe agregar, realizar actividades en
línea abre oportunidades de conformar nodos
de conocimiento, participar en redes e integrar
comunidades de aprendizaje, donde es posible
formarse con otras personas, a través del uso de
distintos recursos asociados a un universo de
temas, dependiendo de los intereses de cada
individuo. En tal sentido, ubicuidad significa
posibilidades de aprender en contextos
distintos.
En efecto, Hooft et ál. (2007, citado por
García, 2017), manifiesta el aprendizaje
ubicuo, “se genera en un ambiente en el que los
alumnos pueden acceder a diferentes
dispositivos y servicios digitales, así como a los
dispositivos móviles, siempre y cuando los
necesiten” (p. 20), en consecuencia, el proceso
de aprendizaje ocurre en cualquier momento o
lugar. En atención a las ideas precedentes,
resulta claro el estudiante debe asumir
responsablemente la dirección de su proceso de
aprendizaje, precisamente los PLE están
orientados a generar respuestas a las demandas