Introducción
En los últimos 20 años, poco se ha
impulsado el crecimiento de la investigación
artística musical. De acuerdo con lo sustentado
por López-Cano “Requiere de una
sistematización metodológica particular de
experiencias adquiridas en el entorno del
estudiante, las cuales pueden recogerse a través
de trabajos etnográficos” (2013, p. 86). Sin
embargo, Vegas sustento “que se necesita crear
un gabinete especializado, realizar trabajos de
campo para crear archivos sonoros y
fotográficos, coleccionar instrumentos
musicales y crear un instituto de musicología”
(1931, p.12). Por ello, diversos investigadores
concuerdan que los estudiantes no desarrollan
la investigación artística musical, porque ésta
no se le reconoce como un lenguaje particular.
Por otro lado, Montero cree firmemente
que es “imprescindible abrir espacios para el
diálogo con las sociedades de compositores a
través de foros, cursos, conferencias, actos
especiales y así investigar permanentemente su
obra” (2001, p.01). Asimismo, cuando se
atribuye un objeto de estudios a una sola
disciplina, se configura una dificultad para
desarrollar investigación musical (Otaola-
González, 2015, p. 90). Evidentemente, por
eso hoy en día los proyectos de investigación
artística musical siguen teniendo una presencia
débil en las universidades, a causa de la
descontextualización de los programas
curriculares que no permiten generar nuevo
conocimiento que conecte con la realidad del
estudiante y que los motive para investigar por
ejemplo la música de su pueblo aprendiendo
desde lo básico que se requiere.
En ese sentido, nuestro punto focal
fueron los estudiantes del II ciclo del curso de
arte de la Universidad Nacional de Frontera del
Perú, donde se ha identificado que no han
tenido experiencias previas de investigación
sobre patrimonios musicales de su región,
desconocen el proceso metodológico y las
técnicas de la investigación artística musical.
Este problema es importante solucionarlo
porque permite a los estudiantes entrenarse en
el ejercicio metodológico de la investigación y
aprender aplicar técnicas basadas en el marco
metodológico-teórico, que a su vez están
sustentadas en el marco normativo de la ley
universitaria N° 30220 que a su letra en su
artículo 48 refiere: “la investigación constituye
una función esencial y obligatoria de la
universidad, que la fomenta y realiza,
respondiendo a través de la producción del
conocimiento” (Ley Universitaria 30220,
2014, p.25).
Ante esta problemática, el objetivo
principal fue proponer un programa curricular
basado en un enfoque contextualizado para
desarrollar investigación artística en los
estudiantes del II ciclo del curso arte de
Facultad de Administración, Hotelera y de
Turismo de Universidad Nacional de Frontera
de Sullana – Piura - 2020. Por esta razón, se
elaboró un programa curricular para ser
incorporado en el silabo en 8 semanas (una
unidad), el cual contiene 8 sesiones de clases,
material de trabajo, rubricas de evaluación,
este material didáctico creativo permitirá
mejorar su nivel de conocimiento de los
estudiantes sobre las técnicas de investigación
artística.
Metodología
El diseño metodológico responde al
enfoque cuantitativo de tipo no experimental,
de estudio propositivo, porque el investigador
no realizó un proceso de aplicación de la
propuesta curricular con enfoque
contextualizado, sólo aplicó tres instrumentos
de investigación a estudiantes del curso de arte
del II ciclo, docentes asignados a enseñar el
curso de arte y jerárquicos de la facultad de
Administración, Hotelera y de Turismo para
diagnosticar el problema en toda su magnitud.
Posterior a ello, con dichos resultados
permitieron elaborar y validar la propuesta de
programación curricular basado en un enfoque
contextualizado a través de un juicio de
expertos conformados por un metodólogo, un
especialista. De acuerdo con el autor
Hernández-Sampieri, et al. (2014), el diseño de
investigación de tipo propositivo fue el
ilustrado en la Figura 1: